Si las tecnologías más eficientes se unen a una conducción sostenible, obtendremos grandes resultados. Empieza por seguir estos nueve sencillos eco-consejos de conducción:
1. Conduce de forma relajada.
Frenando poco, dejando que el vehículo ruede aprovechando el impulso y siguiendo el tráfico.
2. Revisa periódicamente la presión de los neumáticos.
La resistencia a la rodadura representa hasta un 15% del consumo total.
3. Utiliza aceites de bajas viscosidad.
Producirás menos emisiones y reducirás el consumo de combustible.
4. Evita el uso de accesorios que reduzcan la aerodinámica.
Un aumento del 33% de la resistencia aerodinámica aumenta el consumo de combustible hasta en casi 2l/100km a 120 km/h.
5. Viaja con el mínimo equipaje.
Reduce el peso del vehículo. Cada kilo de equipaje cuesta combustible: 100 kg de peso aumentan el consumo en hasta 0,3l/100km.
6. Usa el equipamiento con moderación.
Por ejemplo, el climatizador consume combustible: en pleno verano puede llegar a consumir hasta 2l/100km.
7. Deja que el coche ruede sin acelerar en bajadas o al llegar a un semáforo.
Si dejas que el coche ruede con la marcha engranada, en bajadas o al llegar a un semáforo, consigues un consumo de 0,0l/100km.
8. Conduce con la marcha más larga posible.
Cuando arranques, pasa rápidamente a segunda y, en cuanto puedas, a tercera. Reducirás las emisiones acústicas y el consumo de combustible.
9. Evita coger el coche en trayectos cortos.
El motor consume más cuando está frío. Por ello si se utiliza para muchos trayectos cortos puede llegar a tener un consumo de hasta 30 l/100km.